- 01/06/2014
- Posted by: Iglesia Dinamarquesa
- Categoría: Anuncios, Noticias
Jueves 19 de junio a las 19:30 horas:
“Días del Cielo” (1978)
(Subtitulada en ESPAÑOL)(Bono contribución a voluntad – Se sugiere mínimo $20)
“Días del Cielo” es una película norteamericana de 1978, escrita y dirigida por Terrence Malick. Fue premiada en el Festival de Cannes, por mejor dirección; y recibió un Oscar, por mejor fotografía.
La trama se desarrolla en 1916, y narra la historia de dos amantes de Chicago, sumidos en la pobreza. Bill y Abby, deciden viajar a Texas, para levantar las cosechas de un rico granjero, quien se enamora de Abby. Bill anima a Abby a reclamar la fortuna del granjero, a quien engañan con un
falso matrimonio. El resultado, es un inestable triángulo amoroso y una serie de eventos desafortunados.
La historia tiene paralelismos bíblicos. Habrá una breve introducción a estos paralelismos, y un debate, al término de la película.
Jueves 26 de junio a las 19:30 horas:
“KAPRINGEN” (2012)
(Subtitulada en ESPAÑOL)(Bono contribución a voluntad – Se sugiere mínimo $20)
“El Secuestro”, es una escalofriante película danesa de 2012, escrita y dirigida por Tobias Lindholm. Un film que no da respiro y que atrapa, por el fiel análisis de las reacciones humanas ante situaciones extremas.
Mikkel, el cocinero de un barco mercante, saborea el momento de contacto telefónico con su esposa y su hija, cuando les anuncia que en muy poco tiempo habrá acabado su misión y regresará a casa para descansar por unos meses. Lejos está de pensar que, minutos después, unos piratas modernos de las costas africanas se apoderarán del barco, y un supuesto traductor será el único interlocutor de una tripulación angustiada y temerosa por su vida. Y no es para menos.
A esta explosiva situación, se añaden las negociaciones que lleva adelante Peter, director de la empresa naviera, que sabe que el menor error puede saldarse con la pérdida de una o varias vidas de la tripulación. Impecablemente interpretado por Søren Malling, este empresario va a tener que sudar la camisa para no perder los nervios, tranquilizar a las familias, contentar al grupo económico al que pertenece y sobrevivir a la extorsión.
Magistralmente dirigida y con un ritmo implacable, la tensión se masca en la pantalla y en la sala. Cada plano añade una gota de nerviosismo extremadamente real en cada espectador. ¡Imperdible!